Esta pintura de escuela limeña del siglo XIX representa a San José con el Niño Jesús. La escena muestra al santo coronado, sosteniendo con ternura al Niño en brazos, en un gesto de cercanía y protección.
San José viste un manto ricamente decorado con motivos dorados, símbolo de nobleza y devoción. En su mano izquierda sostiene una vara florida, atributo característico que alude a su pureza y elección divina como esposo de María.
El Niño Jesús, desnudo y envuelto en un paño claro, se acoge al rostro de su padre terrenal, destacando la intimidad afectiva entre ambos.
El fondo verde sobrio y el marco ornamentado en dorado refuerzan la solemnidad de la composición, típica del arte virreinal y republicano temprano en Lima, donde el motivo de la Sagrada Familia era uno de los más difundidos en la devoción popular.